Portugalete acomete la urbanización del último tramo de Maestro Zubeldia

El tramo final de Maestro Zubeldia será renovado de forma integral
Se renovarán las aceras, la calzada y la iluminación, entre otros trabajos, y se introducirá la tubería para la recogida neumática de basuras, actuación que también se realizará en Ramón y Cajal

Las obras de urbanización del último tramo de la calle Maestro Zubeldia comienzan este mes, unos trabajos con los que se renovará toda la vía de una forma integral. Se dará a las aceras una anchura de entre dos y cuatro metros y permitirá eliminar toda la iluminación de las fachadas de los edificios para ponerlas a pie de calle. “Consideramos que este ensanchamiento traerá mayor comodidad no solo a los vecinos, sino también a los locales hosteleros, que podrán sacar sus correspondientes terrazas», explica Mikel Torres, alcalde de Portugalete.

Así la calzada pasará a tener un ancho de 3,10 metros y se conservarán todos los aparcamientos a ambos lados de la calle, así como los de carga y descarga y los reservados para personas con movilidad reducida. Además se levantarán siete pasos de cebra elevados en la misma calle o en intersección con las demás.

Tras las obras, la calle en su tramo final se convertirá en una de único sentido, de salida hacia Ramón y Cajal. “Esto nos va a permitir eliminar ese cruce al final de la calle junto al cementerio, que actualmente es muy peligroso, y mejorar la seguridad de la circulación en esa zona, aclara el regidor.

Simultáneamente a estas obras se llevará a cabo la instalación de la tubería de recogida neumática de basuras (RNB), tanto en ese tramo de Maestro Zubeldia como en la calle Ramón y Cajal, y se colocarán los correspondientes buzones para que se ponga en funcionamiento. Según el alcalde del municipio, este es el sistema “más moderno, tecnológico, sostenible y que más respeta el medio ambiente en lo que se refiere a la recogida de residuos”.

Gracias a esta actuación se calcula que desaparecerán 30 contenedores de las calles y los camiones de basura dejarán de circular por la zona, lo que reducirá el CO2 en el ambiente. Portugalete fue pionero en Euskadi y en España en este sistema que conlleva la urbanización por completo de las calles, es decir, se cumple una doble función porque se renueva la ciudad y se recoge la basura de una mejor forma. Para la ejecución de la obra se introducirá una tubería de acero al carbono de 360 metros de longitud que transcurrirá por toda la calle Ramón y Cajal, desde Maestro Zubeldia a la Avenida Repélega, y servirá como conducción para llevar los residuos hasta la central de Rivas.

Aprovechando esta tubería, se va a proceder también a realizar cuatro ramales perpendiculares, para depositar los residuos de los propios vecinos de Ramón y Cajal, así como de una parte de los vecinos del Grupo el Progreso y de las  calles Francisco Berriozabal, Vicente Durañona, Juan Antonio Zunzunegui y Alfonso del Pozo.

En total, ambas actuaciones tendrán un presupuesto de 2.550.000 euros, íntegramente financiados por el Ayuntamiento, y conseguirán que 1.600 viviendas puedan depositar sus residuos a través del sistema RNB. Se calcula que una vez finalizadas las obras, dentro de unos siete meses, aproximadamente, un 65% de la población portugaluja ya contará con este servicio. Además, se recogerán unos 550.000 kilos más de basuras al año, que se sumarán a los más de 4 millones que se recolectan actualmente.