Portugalete homenajea a las maestras y al historiador Tasio Munarriz
Portugalete rindió homenaje “a las mujeres corrientes, valientes y resilientes” en el acto anual de recuperación de la Memoria Histórica celebrado en el Centro Cultural Santa Clara el pasado 22 de junio, en el que se recordó a las maestras vocacionales que desarrollaron su labor en los años anteriores a la Guerra Civil.
Así, la hija de María Dolores Vivanco (1905-1986), Lola Madariaga Vivanco, de 90 años, habló sobre la vida de su madre, maestra portugaluja de familia burgalesa, que empezó su trayectoria profesional en 1927 como profesora auxiliar en el recién inaugurado Colegio Maestro Zubeldia. En 1930 se casó con Pedro Madariaga Recalde, que estuvo 12 años exiliado y “mi madre, que nunca hizo un drama de nada, se hizo a la idea de que mi padre no iba a volver nunca y nos decía a mi hermano y a mí: lo que tenemos que hacer nosotros es seguir viviendo”, relató Lola.
Dolores Vivanco era de ideas republicanas, en contraposición a las de sus padres, que eran monárquicos, y a la ideología nacionalista de la familia de su marido. “Es una historia sencilla pero, como mi madre, hubo maestras que pasaron unas peripecias terribles”, añadió.
Persona querida
Otro de los personajes recordados y más queridos en la localidad que dejó plasmados acontecimientos y testimonios de otra época fue Tasio Munarriz (1942-2020), “el historiador de nuestra historia más reciente”, tal y como le describen aquellos que le conocieron bien. Falleció el pasado mes de octubre a los 78 años, dejando evidencia de “la gran capacidad de trabajo que poseía, ya que no cejaba en su empeño por recoger y exponer de forma fidedigna y rigurosa cualquier dato por pequeño que fuese”, explicó en el acto el archivero municipal del Ayuntamiento de Portugalete, Roberto Hernández Gallejones.
“Desde el punto de vista histórico, es la persona que más ha contribuido a nuestro pasado y a nuestra memoria. Un hombre de carácter crítico e independiente, humanista y con un fuerte sentido de la justicia”, añadió Roberto. Cuando se jubiló, en 2007, encaminó sus pasos a los archivos municipales y se dedicó a estudiar el rico pasado portugalujo, desde la Guerra Civil a la República, pasando por el final de la dictadura y la transición a la democracia.
El alcalde, Mikel Torres, agradeció a los amigos y familiares de los homenajeados su asistencia: “La historia es para contarla y la reparación y la justicia son fundamentales. Estas dos personas nos han dejado un legado que no podemos pagar”.
El acto se despidió con un ‘agurra’ a cargo de un grupo de dantzaris y, posteriormente, los asistentes depositaron un clavel rojo en el monolito situado a la entrada de Santa Clara, diseñado por el artista jarrillero Juanjo Novella en homenaje a quienes padecieron la Guerra Vivil en Portugalete.
