La Fundación El Abra pone fin a su andadura con el 32º Cuaderno Jarrillero
La entidad no cuenta actualmente con relevo generacional, pero los cuadernos seguirán editándose por parte del Ayuntamiento y sus archivos pasarán a ser de titularidad municipal
La Fundación El Abra pone fin a su andadura. Se creó hace 30 años, de la mano de Rubén Las Hayas, Paco Ruiz y Txomin Bereciartua (fallecido el pasado año), con el fin de poner en valor la historia de la Noble Villa mediante colecciones de libros y fotografías durante los siete siglos de la villa. A su legado se suma una última colección de fotos de los años 30 y 40 de la Villa, la edición 32º del Cuaderno Jarrillero, que los vecinos pueden conseguir en Santa Clara y en la biblioteca municipal.
La Fundación cuenta con “miles de fotografías de época, quizá 70.000”, afirma su presidente. Además de colección de revistas, cuadernos portugalujos, artículos de investigación, etc.
La entidad cogió el testigo de la revista El Abra de los años 60, que a su vez siguió el ejemplo de otra con el mismo nombre de los años 20. Actualmente no hay relevo generacional, pero Las Hayas espera un futuro propicio al respecto. “Quizá en 10 o 15 años el proyecto siga de mano de otras personas”.
Para que no se eche a perder este legado, el Ayuntamiento seguirá publicando los Cuadernos Jarrilleros con voluntarios, entre ellos el propio Las Hayas. Por su parte, los archivos de la Fundación pasarán a titularidad municipal, para que quien quiera pueda acceder a ellos en cualquier momento. Por ahora se desconoce la frecuencia que tendrán las futuras colecciones, pero todo dependerá de los vecinos. Hasta ahora se han publicado dos al año.
Por otra parte, el blog Mareómetro, creado también por Las Hayas y que cuenta con el fondo bibliográfico digital de la fundación, continuará en activo. La web incluye todo tipo de publicaciones durante los siete siglos de la Villa.
